Luego de plantear las dudas y ambigüedades entorno al concepto de resiliencia urbana en posts anteriores, me veo obligada a preguntarme si éste tiene capacidad explicativa o abre nuevas perspectivas metodológicas, más allá de su cualidad evocadora. Y, efectivamente, creo que sí. La óptica de la resiliencia urbana permite, a mi juicio, analizar los cambios bajo algunos parámetros no exclusivos del concepto pero sí interesantes analizados en conjunto:

  1. La idea de shock o manifestación del problema: supone un punto de referencia a partir del cual medir la realidad (anterior y posterior). Ayuda a situar en el tiempo y en el espacio.
  2. La idea de vulnerabilidades o umbrales críticos: que, aunque pueda generar divergencias según las ópticas de los diferentes grupos sociales e intereses en juego, pueden ser muy útiles en el caso de gestión de infraestructuras o riesgos medioambientales, muy explicativas en medición de predicciones o efectivas en el análisis de causas de crisis o irrupción de nuevos eventos.
  3. La idea de path dependence o trayectorias de dependencia: considera las condiciones iniciales y los eventos significativos desarrollados en un territorio concreto a lo largo de su historia, que pueden reforzar patrones preexistentes después del shock o explicar cambios de trayectorias.
  4. La idea de punto de inflexión o histéresis: que se produce cuando, en un momento determinado, algunos elementos o capacidades del período anterior modifican su relación de fuerzas permitiendo un cambio estructural.
  5. La idea de patrones alternativos o en disputa: sugiere el estudio de las discontinuidades, sus posibilidades y sus trabas antes y después de la irrupción o manifestación del problema. Permite el análisis de los imaginarios sociales preguntando “¿hacia dónde?”
  6. La idea de capacidades existentes y/o emergentes: Saskia Sassen, en su libro Territorio, autoridad y derechos define estas capacidades como “producciones colectivas en un sistema de relaciones”. La articulación de estas capacidades puede explicar, desde su punto de vista, un nuevo acontecimiento.
  7. La idea de multiescalaridad: que sugiere el análisis de las influencias entre escalas en los procesos, y sus interelaciones top-down / bottom-up.
  8. La idea de temporalidad en el análisis de las influencias o cambios sustantivos: las variables asociadas a los cambios, así como las diversas escalas interrelacionadas, están sujetas a tiempos diferentes (que se definen como variables de cambio rápido o de cambio lento), y confluyen con estas discontinuidades temporales.

Todo ello conlleva, además, un análisis con perspectiva histórica y el énfasis en el estudio de los procesos, sin desmerecer la capacidad de visualizar los resultados o impactos a través del análisis pre-post manifestación del shock. En principio, me convence.